Con la intención de reactivar nuestra esencia divina, recibiendo los códigos de luz que estaremos sosteniendo en nuestro útero, corazón y glándula pineal, alineando nuestro ADN a su diseño original divino, la geometría sagrada que del ser, durante el portal 22/02/22 despertando los dones del alma de las diosas de Gaia. 5 días sostenidas por la selva maya, en un templo místico y sagrado, honrando los elementos que compone al alma individual y colectiva, aire, tierra, fuego y agua. Si sientes el llamado, estamos aquí al servicio de la madre divina, con el corazón abierto.
Cada alma femenina, eligió encarnar en la tierra con la misión de recordar su esencia divina a través de su conexión con la naturaleza, cada vez que una mujer conecta con su sabiduría interior, le da la bienvenida a su propia Diosa que se ilumina través de la conexión con su espíritu infinito, para así, participar en la creación de una nueva humanidad que se está gestando en nuestras matrices. Es importante reconocer que en estos momentos de grandes cambios y desafíos en que la humanidad se encuentra, el despertar de la mujer es esencial para poder realizar la gran misión de Dios.
El rol de la mujer está cambiando, hace unos años, las mujeres todavía estábamos dormidas en el rol pasivo que nos dió la sociedad, sumisas, sin voz, sin poder expresar nuestra inconformidad con el sistema. Nos educaron para quedarnos quietas en “nuestro lugar”, el que nos habían dado. Sin embargo ya no podemos seguir así, TODAS LAS MUJERES DEL PLANETA, estamos siendo llamadas al servicio de la Madre Sagrada.
Todas y cada una de las mujeres de este planeta, estamos siendo llamadas para activar nuestra matriz, el lugar más sagrado del cuerpo femenino, lo que nos conecta directamente con la matriz de la vida. Todas y cada una de las mujeres de este sagrado planeta, estamos siendo convocadas a sanar, a equilibrarnos, nuestra misión nos reclama: En nuestros úteros, en nuestras matrices se gesta una nueva humanidad, que necesita recibir nuevos códigos.
Las abuelas, las madres, las niñas, todos los seres femeninos, estamos siendo removidas en todo aquello que necesitamos sanar. Nuestras memorias nos están mostrando lo que debemos aceptar, con amor, compasión y responsabilidad personal. Amar nuestra historia personal, para asumir una nueva perspectiva de nuestro poder creativo. Nuestra misión es para el futuro y constituye la base de la nueva humanidad: EL AMOR
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